Las hazañas deportivas del atleta checo Emil Zátopek son bien conocidas entre los aficionados al deporte olímpico. Especialmente, por una gesta de la que este verano se cumplen 70 años y que aún no ha sido igualada: la obtención, en los Juegos de Helsinki 1952, de tres oros en 5.000 metros, 10.000 y maratón. Aquello le valió a Zátopek el apodo de La Locomotora Humana y supuso la consolidación de un mito que se había comenzado a forjar cuatro años antes en Londres, cuando se había hecho con el oro en los 10.000 y la plata en los 5.000 metros. Con 18 récords mundiales y 69 victorias seguidas en diferentes pruebas, Zátopek se convirtió en héroe nacional en Checoslovaquia y en ídolo mundial del atletismo.